Tiësto y la vuelta a la rutina otoñal

 Tiësto es de mi generación, y a sus 51 años se ven las cosas de otra manera, y aunque sigue haciendo trellazos para la pista de baile como este The Business, se trabaja las letras de otra manera para aportar un contenido del que se acusa a la música de baile de estar carente. Nada más lejos de la realidad.



Esa imagen del dance de estar muy próximo a las drogas de diseño, del desenfreno, del alcohol... Hay de todo en la viña como se suele decir, yo he sido seguidor del electro, el techno y el house desde pequeñito y soy abstemio por convicción, no he probado ninguna droga legal, ni ilegal, a no ser que contemos el popper que bueno alguna vez se me ha ocurrido, y chica, ni tan mal.

El vídeo para The Business es un alegato al derecho a divertirse y a ser capaz de asumir las responsabilidades que tiene cada uno. Es una metáfora. Estás muerto tras una noche loca y el amanecer en forma de chica guapa viene a rescatarte. Tienes recuperarte, comer, tomar algo azucarado acelerará el proceso. El viaje en autobús (al trabajo) y tus continuas ganas de seguir de fiesta... Amanece y el espíritu de la juerga desaparece... es la vuelta a la rutina.

Tiësto es de Breda, que junto a Amberes y Dusseldorf forman el llamado triángulo del techno y del dance, una zona plagada de clubs grandes, pequeños o diminutos donde sólo se escucha dance a cualquier hora. En 2004 fue nombrado por la reina Beatriz Oficial de la orden Orange-Nassau, y ya es considerado uno de los 40 personajes más influyentes de la historia reciente de Países Bajos. Tiene 9 discos de estudio y una lista interminable de singles, versiones, remixes y colaboraciones que no podríamos recoger en este espacio reducido y creo que ni él mismo sabe a ciencia cierta cuántas cosas ha publicado. Es empresario, tiene hoteles, cadenas de restaurantes y varios clubs que compagina con sus actuaciones en directo.



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